Época:
Inicio: Año 1 A. C.
Fin: Año 1 D.C.

Antecedente:
Las mujeres en el exilio

(C) Mercedes Alonso de Diego



Comentario

Es en este terreno donde la utilización de las fuentes orales se muestra más eficaz, al permitir seguir el hilo de la trayectoria vital de los individuos y ver los cambios en sus formas de vida a raíz del exilio.


El asentamiento en México de los refugiados españoles fue para la mayoría un cambio favorable respecto a su situación inmediata anterior: el período de exilio en Francia y la Guerra Civil española. Esta afirmación no implica el olvido de la dureza de la adaptación al exilio y el desarraigo de la patria. Se trata de señalar cómo desde su llegada a México los exilados tuvieron, por fin, cubiertas sus necesidades básicas de alimentación, vivienda, vestido e incluso contaron con asistencia médica y servicios educativos gratuitos. Las facilidades de residencia y trabajo otorgadas a los exilados por los sucesivos gobiernos mexicanos y sus instituciones contribuyeron en gran medida a la rápida integración económica al nuevo país, que se produjo en los años cuarenta.



Otro factor fundamental en su incorporación fue la favorable respuesta de los antiguos residentes españoles en México hacia sus compatriotas. Los 'gachupines' ofrecieron de forma personal puestos de trabajo y ayuda material a los refugiados, por el hecho de ser españoles, pese a las diferencias políticas que los separaban. Más adelante, en los años cincuenta, muchos exilados llegaron a alcanzar una situación de bienestar material mucho mayor que la que tenían en España.



Primera página de

Primera página de "Romance", revista de los exiliados españoles en México




Con respecto a estos cambios que afectan al conjunto de los exilados, algunos estudios han señalado con acierto el éxito económico de numerosos exilados españoles, relacionándolo con su acercamiento a la rica colonia española en México. No obstante, apenas se ha tenido en cuenta la decisiva influencia sobre las expectativas profesionales de los exilados de la situación económica de México en la década de los cuarenta.



En efecto, los exilados pudieron aprovechar una favorable coyuntura económica que permitía, a quienes poseían un capital inicial, el enriquecimiento en los negocios. Ello se debía, principalmente, al largo período de congelación salarial y de altos precios que vivió el país desde 1940 a 1946. Los préstamos de la JARE y la alta cualificación profesional de los exilados también contribuyeron a su éxito económico. El haber conseguido o no dicho éxito y la situación de bienestar material alcanzada influyen en gran medida en la valoración que los protagonistas hacen de la experiencia del exilio, de lo que perdieron al abandonar España y de lo que les ha dado México.